LOS DUELOS. SUPERAR LAS PÉRDIDAS

LOS DUELOS. SUPERAR LAS PÉRDIDAS, Centro Óptima

LOS DUELOS. SUPERAR LAS PÉRDIDAS

Según las estadísticas, Septiembre es el mes con más rupturas de parejas, lo que conlleva cambios, adaptaciones y superar una pérdida. En relación con esto, hoy voy a hablar de los duelos, camino por el cual de una forma u otra, todos hemos recorrido al perder algo que queríamos. El duelo es un proceso muy personal, que se experimenta de muchas y variadas maneras. Las personas, establecemos lazos emocionales con personas, animales y objetos, manifestándose el duelo cuando estos lazos se ven amenazados o se rompen.

            Ante el duelo, tendemos a reaccionar con tristeza, que es la más común y se manifiesta mediante la conducta de llorar. El enfado, la culpa y autorreproches, ante el hecho de que no se hizo todo lo que se pudo para evitar la pérdida… aislamiento físico y pérdida de apoyo social, sensaciones físicas como: opresión en el pecho, falta de energía, disminución o aumento de peso, no disfrutar con las actividades que disfrutábamos antes….

En ocasiones, este proceso de duelo se realiza de forma adaptativa y con el tiempo, se supera la pérdida, sin embargo, a veces se puede complicar. Un duelo complicado es aquel duelo que se intensifica, en el que la persona está desbordada y que no avanza hacia la resolución de ese duelo.  Hay varias maneras de que un duelo se convierta en complicado, son los siguientes:

-duelo crónico o prolongado, es aquel que tiene una duración excesiva tanto en tiempo como en sintomatología.

-duelo retrasado, a veces se llaman duelos pospuestos, porque la persona, bien por ella misma o por las circunstancias, no ha podido elaborar el duelo.

-duelo enmascarado, la persona no es consciente de que el duelo no resuelto es la razón de ciertos síntomas que padece y se manifiesta como: hiperactividad, fatiga crónica, dolores de cabeza frecuentes o problemas digestivos… 

Pero… ¿Qué podemos hacer para superar un duelo?

  1. Aceptar la realidad de la pérdida, por muy difícil y dolorosa que sea.
  2. Trabajar las emociones y el dolor de la pérdida, en esta fase se tiende a realizar la negación, el no sentir el dolor. Buscamos que se dé rienda suelta al dolor, sentirlo y saber que un día pasará.
  3. Adaptarse a la nueva situación que deriva de esa pérdida.
  4. Recolocar emocionalmente aquello que hemos perdido y continuar viviendo. Consiste en encontrar un lugar adecuado dentro de nosotros, para aquello que se ha perdido a la vez que se deja un espacio para las demás personas.

Elaborar un duelo es algo que lleva tiempo, es cierta la frase de que “el tiempo lo cura todo”, pero también es verdad que el duelo ha de cumplir una serie de tareas o fases, que son desbordantes y dolorosas para la persona que sufre la angustia de una pérdida, es por ello, que con ayuda psicológica se pueda superar y sanar.

Vanessa Gómez  (Psicóloga – Sexóloga)